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Alfa Romeo vuelve a la Fórmula 1

Alfa F1
01-12-2017
ITALIA. Alfa Romeo, marca de Fiat Chrysler Automobiles (FCA), selló un acuerdo de colaboración técnica y comercial por varios años con Swiss Sauber F1 Team, para participar en el campeonato mundial de Fórmula 1 a partir de la temporada 2018. El nombre oficial del equipo será Alfa Romeo Sauber F1 Team. Los monoplazas lucirán los distintivos colores y el logotipo de la marca, el patrocinador del título del equipo, y estarán equipados con unidades de potencia Ferrari 2018.

El alcance del acuerdo incluye la cooperación estratégica, comercial y tecnológica en todas las áreas de desarrollo aplicables, incluido el acceso a los conocimientos técnicos de ingeniería y la experiencia del personal técnico de Alfa Romeo. Esta asociación proporcionará oportunidades adicionales para las dos organizaciones tanto en la Fórmula 1 como en el sector automotriz en general.

Al respecto, Sergio Marchionne, CEO de FCA, afirmó: «Este acuerdo con el equipo Sauber F1 Team es un paso significativo en la remodelación de la marca Alfa Romeo, que volverá a la Fórmula 1 después de una ausencia de más de 30 años. Una marca legendaria que ha ayudado a hacer historia de este deporte, Alfa Romeo se unirá a otros grandes fabricantes de automóviles que participan en la Fórmula 1».

Alfa Romeo es conocido en todo el mundo por su herencia de carreras y excelencia tecnológica. El campeón indiscutible del Gran Premio de antes de la guerra (en 1925, el GP Tipo 2 dominaba el primer Campeonato Mundial), Alfa Romeo participó en la Fórmula 1 desde 1950 hasta 1988, como constructor y proveedor de motores. Inmediatamente después de su debut, Alfa Romeo ganó los dos primeros campeonatos mundiales de pilotos, en 1950 y 1951, con los pilotos Nino Farina y Juan Manuel Fangio. De 1961 a 1979, fue proveedor de motores de varios equipos de F1. Tras su regreso como constructor en 1979, logró su mejor resultado en 1983, obteniendo el sexto lugar en el campeonato de constructores. Más de 30 años después de retirarse como competidor de la Fórmula 1 (1985), la marca regresa con la clara intención de dejar su huella.